El aislamiento impuesto por el estado de alarma en España sólo deja margen para salidas muy controladas, como las que hay que hacer al supermercado. Es habitual encontrar a ciudadanos que acuden a estos establecimientos con sus propios guantes y mascarillas y que esperan, pacientes, su turno para entrar en la tienda. Ciertamente, estas medidas ayudan a reducir el riesgo de contraer el coronavirus, pero conviene saber que existe un gran foco de contagio en el lugar habitual de compra: hablamos del carrito y la cesta del súper.
Así lo asegura un estudio de la escuela de salud pública de la Universidad de Harvard, publicado en la revista The New England Journal of Medicine que recoge RPP Noticias, en el que incluso se afirma que se trata del «mayor foco de contagio» del virus cuando se adquieren alimentos.
Este análisis indica que el virus permanece hasta tres días en superficies duras de plástico o acero, como lo son las asas de la cesta o del carrito de compras. En el caso del cartón, el COVID-19 puede permanecer hasta por 24 horas y cuatro en el cobre.